Información esencial sobre la insuficiencia cardíaca
 

Desarrollado con pacientes, organizaciones de pacientes y cuidadores para las personas que viven con insuficiencia cardiaca

Reciba información basada en hechos sobre la insuficiencia cardíaca 

‘Pensé que mi vida se había terminado hasta que me enteré de lo que realmente significaba para mí la insuficiencia cardíaca’.

Números de la insuficiencia cardíaca

¿Cuánto sabe usted realmente sobre la insuficiencia cardíaca? ¡Estamos aquí para ayudarlo simplemente brindándole los hechos!

El hecho de tener insuficiencia cardíaca no significa que su corazón haya dejado de funcionar. Sigue bombeando, pero tiene que hacer un esfuerzo para poder bombear toda la sangre que su cuerpo necesita. La insuficiencia cardíaca puede afectar a ambos lados del corazón o sólo a uno.

Estos 3 términos son conocidos para la mayoría de las personas, pero es común que se confundan entre sí. Un ataque cardíaco es cuando el flujo de sangre hacia el corazón se interrumpe por alguna obstrucción, y un paro cardíaco es cuando el corazón funciona mal y deja de latir inesperadamente. La insuficiencia cardíaca se produce cuando el músculo cardíaco no puede bombear una cantidad de sangre suficiente para satisfacer las necesidades del cuerpo y eso hace que se acumule líquido en los tejidos.

Si bien la insuficiencia cardíaca es más frecuente en las personas mayores de 65 años, los niños y los adultos más jóvenes también pueden desarrollar esta afección. Los síntomas y el tratamiento variarán en función de la edad de la persona.

Se estima que en el mundo existen 26 millones de personas que padecen insuficiencia cardíaca, con lo cual es importante que usted tome conciencia de que no está solo.  

Usted no puede controlar su edad ni sus antecedentes de salud, pero puede brindar a su médico información sobre sus antecedentes médicos familiares, y el médico puede realizarle controles para ver si usted tiene riesgo de desarrollar insuficiencia cardíaca. Otra cosa que usted puede hacer es adoptar hábitos saludables, como dejar de fumar, tener una alimentación sana y hacer ejercicio con regularidad.

El ejercicio es parte de un estilo de vida sano para el corazón. Sin embargo, es importante no exagerar tampoco con el ejercicio. El ejercicio en su justa medida puede ayudarlo a mejorar la circulación sanguínea y aliviar alguno de sus síntomas. Converse con su médico sobre qué sería lo adecuado en su caso.

Muchas personas se ven invadidas por todo tipo de emociones cuando se les diagnostica que padecen insuficiencia cardíaca. Buscar el apoyo de otras personas en la misma situación o buscar acompañamiento terapéutico profesional puede ayudar a mejorar su salud emocional y su bienestar general.

Si bien puede ser difícil convivir con una afección crónica como es la insuficiencia cardíaca, muchas personas aprenden a manejar los síntomas y a disfrutar de sus vidas. ¡El conocimiento es poder! Adoptar nuevos hábitos, como comer más sano, registrar y manejar los síntomas y hacer ejercicio (según las indicaciones que le haya dado su equipo de atención médica), puede ayudarlo a lograr que sus síntomas y su bienestar emocional mejoren.

Este es su corazón y esta es su vida... ¡y es por eso que es usted el que tiene que ocuparse de elegir lo mejor para cuidarse! Su equipo de atención médica puede recomendarle un plan de tratamiento, pero después dependerá de usted hacer que se convierta en parte de su vida diaria. Exprese libremente lo que piensa, haga preguntas y siéntase libre de compartir sus inquietudes respecto de lo que le funciona o no a usted. Asumir un rol activo y trabajar junto con su médico para generar un plan de manejo de la insuficiencia cardíaca puede ayudarle a tener un mayor grado de control sobre su insuficiencia cardíaca.